El presidente Joe Biden anunciará el martes que Merck ayudará a Johnson & Johnson a fabricar su vacuna COVID-19 para acelerar el suministro.
Por USA Today
“Sintonice los comentarios del presidente sobre esto, y más, más tarde esta tarde”, tuiteó el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Ron Klain .
Un funcionario de la Casa Blanca confirmó el anuncio, que fue informado por primera vez por The Washington Post.
También el martes, los centros de vacunación comenzarían a recibir algunas de las 3,9 millones de dosis de vacunas J&J, que recibieron autorización de uso de emergencia el sábado. Esa es la totalidad de su inventario actual.
La administración ha dicho a los estados que la distribución y la entrega serán desiguales a principios de marzo.
La mayor parte de los 20 millones de dosis totales de la compañía que se espera que se entreguen a finales de mes se concentrarán en la última quincena de marzo.
Se espera que J&J produzca 100 millones de dosis para fines de junio.
El acuerdo entre Merck y J&J, que fue negociado por la administración Biden, podría impulsar drásticamente la oferta, según The Washington Post.
En la sesión informativa diaria previa al anuncio de Biden, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, calificó la empresa como una “asociación de fabricación histórica”.
“Tan pronto como nos enteramos de que Johnson & Johnson estaba atrasado en la fabricación… tomamos medidas para asegurarnos de poder acelerar eso con uno de los fabricantes más grandes del mundo”, dijo Psaki.
La administración invocó la autoridad en tiempos de guerra de la Ley de Producción de Defensa para asegurarse de que Merck tenga los componentes de la vacuna y el equipo necesarios para fabricar la vacuna, dijo Psaki. El Departamento de Defensa también está brindando apoyo logístico.
“Hemos utilizado todo el poder del gobierno federal para acelerar la fabricación”, dijo Psaki.
Merck no está produciendo su propia vacuna.
Los otros dos están hechos por Moderna y Pfizer-BioNTech.
La mayoría de las comunidades tendrán los tres tipos de vacuna contra el coronavirus, pero no en todos los sitios de vacunación, dijeron los funcionarios de la administración.
La vacuna de J&J tiene la ventaja de necesitar solo una dosis en comparación con las dos dosis de Moderna y Pfizer-BioNTech. Tampoco es necesario guardarlo en un congelador, lo que facilita su transporte y almacenamiento.
Pero las vacunas Moderna y Pfizer-BioNTech parecen ser más efectivas que las de J&J, mostrando una efectividad superior al 94% en los grandes ensayos que realizaron el año pasado.
Sin embargo, las vacunas no se pueden comparar directamente porque los ensayos se realizaron en diferentes momentos. La vacuna de J&J pareció tener una efectividad del 72% entre los participantes del ensayo de EE. UU. Fue menos eficaz en Sudáfrica y América Latina, donde circulan cepas más nuevas del virus.
Fue casi 100% efectivo para prevenir hospitalizaciones y muertes.
“Esto significa que ahora tenemos tres vacunas seguras y altamente efectivas que previenen enfermedades graves, hospitalización y muerte por COVID-19”, dijo el lunes Rochelle P. Walensky, directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Pero debido a la diferencia en la efectividad para contraer el virus, los funcionarios de la administración dijeron que están indicando a las jurisdicciones que los distribuyan de manera equitativa, y estarán atentos para asegurarse de que eso suceda.
“En caso de que ciertas vacunas lleguen sistemáticamente a determinadas comunidades, podremos intervenir”, dijo a los periodistas el lunes la Dra. Marcella Nunez-Smith, jefa del Grupo de Trabajo de Equidad en Salud COVID-19 de la administración. “Estamos aquí para brindar soporte y asistencia técnica para cambiar e intervenir y corregir, si es necesario”.