La Casa Blanca puso un pie en el Pentágono mientras Trump no admite la derrota

La Casa Blanca puso un pie en el Pentágono mientras Trump no admite la derrota

La Casa Blanca en Washington. REUTERS / Yuri Gripas

 

La Casa Blanca del presidente saliente de EE.UU, Donald Trump, colocó este martes en el Pentágono a tres de sus aliados, desmembrando así la cúpula civil del Departamento de Defensa después del despido ayer de su titular, Mark Esper, en un momento en que el mandatario se niega a reconocer su derrota en las elecciones frente a su rival demócrata, Joe Biden.

Las tres nuevas designaciones se hicieron aprovechando la marcha de tres altos cargos del Pentágono.





El Departamento de Defensa informó en un comunicado de la renuncia del subsecretario en funciones de Defensa para Política, James Anderson; del subsecretario de Defensa para Inteligencia y Seguridad, el vicealmirante retirado Joseph Kernan; y de la jefa de Gabinete de la Secretaría de Defensa, Jen Stewart.

El puesto de jefe de Gabinete de la Secretaría de Defensa es el cargo más importante reservado para los civiles en el Pentágono, porque es quien marca la agenda del secretario de Defensa.

Por su parte, el subsecretario de Defensa para Inteligencia y Seguridad es el principal asesor civil en asuntos relacionados con inteligencia militar; mientras que el de Defensa para Política es el máximo responsable de este ámbito en el Pentágono.

La nota explica que Anderson, Kernan y Stewart presentaron este martes sus cartas de renuncia, aunque la del segundo, indicó, era algo “planeado desde hace meses”.

Aparte de informar de los cambios en la cúpula civil, el Departamento de Defensa anunció los nuevos nombramientos.

El nuevo subsecretario de Defensa para Política será el general de brigada retirado Anthony Tata, quien ha trabajado en esta sección del Pentágono como funcionario de alto rango.

Tata es una figura leal a Trump, excolaborador de Fox News y en el pasado ha apoyado teoría conspiratorias. Ha sido designado de nuevo después de que el verano pasado fuera rechazado para el puesto en el Senado por sus comentarios islamófobos y conspiratorios.

Por su parte, Kernan será reemplazado como subsecretario de Defensa para Inteligencia y Seguridad por Ezra Cohen-Watnick, que hasta ahora había ejercido como secretario adjunto en funciones para los Conflictos de Baja Intensidad.

En el caso de Stewart, será reemplazada como jefa de Gabinete del Departamento de Defensa por Kash Patel, que ha formado parte del personal del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.

De acuerdo con el diario The Wall Street Journal, Patel es un ferviente defensor de las causas del Gobierno de Trump.

En el pasado fue asistente del legislador republicano por California Devin Nunes, expresidente del Comité de Inteligencia de la Cámara Baja, y jugó un papel esencial para obstaculizar las investigaciones sobre los presuntos contactos de la campaña de Trump en las elecciones de 2016 con Rusia, dijo el rotativo.

Esper fue sustituido por el director del Centro Nacional de Antiterrorismo, Chris Miller, como secretario de Defensa en funciones y quien asumió las nuevas responsabilidades ayer mismo,

Acerca de Miller, el periódico The Washington Post apuntaba el lunes que tiene una dilatada experiencia castrense, ya que en el pasado sirvió como oficial de las Fuerzas Especiales de EE.UU., conocidos como “boinas verdes”, al comienzo de las guerras en Afganistán, en 2001, y en Irak, en 2003.

En marzo de 2008 se unió a la Administración de Trump como asistente especial del presidente y luego como director de antiterrorismo y de amenazas trasnacionales en el Consejo de Seguridad Nacional.

Llevaba en el cargo de director nacional del Centro Nacional de Antiterrorismo desde agosto.

Con información de EFE