El Dr. Anthony Fauci, un experto en enfermedades infecciosas, dijo que China hizo un “mal servicio” al no permitir que los científicos hablen de manera transparente sobre el coronavirus en los primeros días de la pandemia.
“Creo que las autoridades chinas que no permitieron que los científicos hablaran de manera tan abierta y transparente como realmente podrían hacer un mal servicio”, dijo Fauci a John Catsimatidis en su programa de radio AM 970 el domingo.
Fauci dijo que si los científicos chinos hubieran podido hacer sonar la alarma antes sobre la transmisión del virus de persona a persona, el número de casos en todo el mundo podría haberse reducido.
“Porque al comienzo del brote, afirmaban que esto era solo una transmisión de animal a humano”, dijo.
“Y realmente no había una transmisión de humano a humano en absoluto. Y mantuvieron esa línea durante algunas semanas. Y luego se hizo muy claro cuando los científicos pudieron hablar sobre eso, que, de hecho, había transmisión de persona a persona. … Sí, es otro ejemplo de la desafortunada situación de falta de transparencia desde el principio “, dijo Fauci.
El presidente Trump criticó a China por no advertir al mundo sobre la gravedad del virus después de que se informaron los primeros casos en Wuhan a fines de diciembre y luego no fue transparente sobre la cantidad de infectados en el país.
También acusó a China de utilizar su influencia con la Organización Mundial de la Salud para retrasar los informes cruciales en tiempo real sobre la pandemia.
Un informe de la semana pasada dijo que China se contuvo al proporcionar a la OMS datos completos sobre pacientes y casos y no publicó un mapa genético del virus hasta más de una semana después de que otros tres laboratorios lo decodificaran.
El informe de Associated Press dijo que la demora en los datos genéticos ralentizó el desarrollo de una vacuna y la falta de información concisa sobre el número de casos dificultó determinar qué tan rápido se estaba propagando COVID-19 en todo el mundo.
Hay casi 7 millones de casos de coronavirus en todo el mundo y más de 400,000 han muerto por el virus.