Dimite la ministra española de Sanidad por irregularidades en título universitario

Dimite la ministra española de Sanidad por irregularidades en título universitario

Ministra de Sanidad de España, Carmen Montón, | REUTERS/Juan Medina

 

Por Álvaro Villalobos / AFP

Carmen Montón, ministra española de Sanidad, dimitió este martes tras revelarse unas irregularidades en la obtención de un título universitario, y es la segunda renuncia que sufre el gobierno socialista de Pedro Sánchez en apenas tres meses.





“Le he comunicado al presidente del gobierno mi dimisión como ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar social”, anunció a la prensa.

El caso Montón es el último en una serie de escándalos protagonizados por políticos españoles, sospechosos de obtener másteres universitarios de manera fraudulenta o mediante un trato de favor.

Entre ellos está el líder de la oposición conservadora, Pablo Casado, quien obtuvo un controvertido máster en la misma universidad que Carmen Montón, la Rey Juan Carlos de Madrid.

La polémica en torno a Casado parece haber influido en la renuncia de Montón. Y es que si ésta se hubiera aferrado al cargo, el gobierno socialista, minoritario en el Parlamento, se habría privado así de “una vía de crítica a la oposición, que era relevante”, comentó a AFP el analista político Pablo Simón.

La presión se acumuló durante la jornada sobre la ministra, licenciada en Medicina y titular de un máster en estudios de género por la Universidad Rey Juan Carlos, obtenido cuando era diputada.

Tras unas primeras revelaciones el lunes, la publicación digital eldiario.es desveló este martes que al cierre del curso, en junio de 2011, una de las asignaturas constaba como “no presentado”, pero en noviembre de ese año se convirtió de repente en un “aprobado”.

La universidad reconoció que hubo una manipulación de notas, y que estaba revisando el expediente “asignatura por asignatura” para “depurar responsabilidades”.

La propia Montón admitió la manipulación en una entrevista con la radio Cadena SER, y se defendió diciendo que eso “escapa a [su] ámbito de responsabilidad”.

Montón recibió incluso el apoyo de Pedro Sánchez, quien dijo a la prensa que está “haciendo un extraordinario trabajo y lo va a seguir haciendo”.

Pero minutos después recibió la puntilla, cuando el canal privado La Sexta destapó un posible plagio en su trabajo de fin de máster.

Pese a todo, Montón aseguró a la prensa que ha “aclarado todo aquello que dependía exclusivamente de [su] responsabilidad”, y que se va con “la conciencia tranquila” porque no ha cometido “ninguna irregularidad”. Su reemplazante será María Luisa Carcedo, hasta ahora alta comisionada para la lucha contra la pobreza infantil, anunció el gobierno.

La de Carmen Montón es ya la segunda dimisión en el gobierno de Pedro Sánchez desde que llegó al poder a comienzos de junio.

La anterior renuncia fue la del ministro de Cultura, Maxim Huerta, quien se marchó al cabo de sólo seis días en el cargo después de trascender que fue sancionado por irregularidades pasadas en su declaración de impuestos.

– Continúa el ‘mastergate’ –
La dimisión alarga la lista de casos similares entre políticos españoles, y agrava aún más la imagen de la universidad Rey Juan Carlos, epicentro del escándalo conocido como el “mastergate”.

La saga arrancó en marzo con la entonces presidenta de la región de Madrid, la conservadora Cristina Cifuentes, quien al mes siguiente dimitió tras revelar eldiario.es toda una serie de irregularidades en su máster.

El caso de Cifuentes condujo al de Pablo Casado, compañero suyo del Partido Popular (PP) y líder del mismo desde julio.

Casado reconoció que en 2008, cuando era licenciado en Derecho y diputado en el Parlamento regional de Madrid, obtuvo un máster en condiciones muy ventajosas en la Rey Juan Carlos, ya que le convalidaron 18 de 22 asignaturas, y le dispensaron de asistir a clase.

Su caso está ahora en manos del Supremo, que ha de decidir este mes si lo investiga por prevaricación.

Tanto Cifuentes como Casado y Montón tienen en común el haber cursado sus másteres en el Instituto de Derecho Público, adscrito a la Universidad Rey Juan Carlos. Pablo Simón apunta por ello a “la existencia de una trama organizada”, para “la concesión de títulos universitarios mediante un trato de favor” a determinadas personalidades.

Ante la acumulación de indicios sospechosos, dicho instituto fue clausurado este año por decisión de la universidad, y su director cesado.

El rectorado sospecha incluso que pudo haber una malversación de fondos, y en mayo puso el caso ante la justicia con una denuncia.