En una carta abierta al presidente Nicolás Maduro, el abogado José Amalio Graterol le expresa el rechazo del pueblo del estado Falcón contra las medidas eléctricas, las cuales califica de improvisadas y discriminatorias.
En el texto, Graterol llama insensible al primer mandatario, a quien le asegura “se hace el sordo y finge no percatarse del horror que estamos viviendo los venezolanos y continua impávido con sus discursos estrafalarios, vacios de contenido, para justificar lo intolerable, en cualquier país del mundo civilizado”.
A continuación la carta completa:
Señor presidente:
Me dirijo a usted a fin de manifestarle en toda su intensidad el rechazo generalizado del Estado Falcón, a las improvisadas y discriminatorias medidas que usted ha adoptado contra la colectividad nacional, y en particular contra el sentir falconiano, con el pretexto de la emergencia nacional eléctrica, provocada por la forma inadmisible que Usted utiliza, para enfrentar las situaciones que se le presentan como jefe de Estado, muchas de las cuales creadas por su propia incompetencia y desdén hacia lo que acontezca en Venezuela.
En el día de hoy, comienza un incoherente racionamiento eléctrico al que seremos sometidos los venezolanos, durante cuatro horas diarias. Si sumamos esta orden presidencial, a la ya puesta en vigor con anterioridad por el Ejecutivo, de decretar días no laborables para el sector público los viernes de cada semana, la situación en cuanto a la producción de bienes y servicios ha pasado de ser grave a extremadamente caótica.
El desconcierto que provocan sus políticas es extremo y golpea a la nación venezolana como un todo: no tenemos pan, ni agua, padecemos hambre y no hay medicinas, ni servicios médicos. Aguantamos un servicio eléctrico enmarañado y truculento, luego que el gobierno ha mal gastado cientos de miles de millones de dólares, que se esfumaron y fueron a parar a los bolsillos de los corruptos, alzados con el poder y a quienes usted no persigue, ya que pertenecen a su círculo íntimo, frente a la lamentación del pueblo.
Usted Presidente, ha sido insensible, se hace el sordo y finge no percatarse del horror que estamos viviendo los venezolanos y continua impávido con sus discursos estrafalarios, vacios de contenido, para justificar lo intolerable, en cualquier país del mundo civilizado.
En el reciente despropósito sobre la electricidad, aun cuando de buen grado usted hubiese querido castigar a todos los venezolanos por igual, hizo excepciones que incluyeron a los Estados Vargas y Nueva Esparta por ser turísticos y la gran Caracas, por miedo a las reacciones populares, aunque no lo dijo.
A Falcón la gobernadora del Estado, de su grupo de partidarios que justifican todo lo que usted hace, cada vez que puede en sus peroratas afirma que somos el principal destino turístico de Venezuela y hasta se atrevió en días pasados a organizar un sarao con la ministro de turismo, para encender un fulano motor, imagen esta que es totalmente ridícula.
Nos preguntamos si es verdad que somos el primer destino turístico ¿por qué no se excluyo a Falcón del racionamiento? ¿Será que nos ve sumisos, conformistas y hasta incapaces de razonar por nosotros mismos? No se equivoque presidente, estamos molestos por sus burlas como esta y las del agua, cada vez que se refiere a Falcón, afirma haber enviado dinero para solucionar el problema a sabiendas que no lo hace, ni lo hará.
Presidente, usted frente a todo planteamiento, obtiene soluciones políticas a través del TSJ, para negar las soluciones que propone la AN, hoy todos sabemos que con usted y su grupo en el poder no hay futuro para los venezolanos. Pues bien, hay dos maneras: una de ellas, es que renuncie y deja de ser obstáculo para los venezolanos y otra para la cual lo reto a que, con sus amanuenses, adelante las elecciones y vamos a contarnos para saber ¿Cuál es el sentir de la patria? Si quiere seguir en manos de la incultura, la corrupción, el crimen desatado y la pérdida de valores o que Venezuela resurja grande, prospera, libre y líder del continente. Si es tan valiente, como presume en sus discursos, de un paso al frente!
José Amalio Graterol